¿Qué es y para qué sirve un hosting? ¿Cuál es la diferencia entre un dominio y un hosting? Partes de un dominio ¿Cuáles son los tipos de hosting? Hosting gratuito Hosting compartido Hosting VPS (Virtual Private Server) Hosting dedicado Hosting gestionado o especializado Cloud hosting ¿Cómo contratar un hosting que se adapte a tus necesidades?
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Si quieres empezar a desarrollar una página web seria y estable, vas a necesitar contratar un hosting para dicha web.
Seguramente no conozcas el término “hosting” y te resulte un tanto extraño tener que pagar dinero por una cosa que tiene un nombre tan peculiar y que no sabes para qué se utiliza.
Pero no te preocupes, es algo muy sencillo de comprender y en este post te ayudaremos a entenderlo explicándotelo a fondo. Del mismo modo, el mercado del hosting en España ha ido evolucionando con el paso de los años.
Y por suerte, ya existe un gran abanico de hosting en español de muy buena calidad entre los que podrás elegir y además, con precios muy económicos.
Esto hasta hace un par de años no era así, pues era más complicado encontrar un hosting bueno y consistente.
¿Qué es y para qué sirve un hosting?
El hosting, o también conocido como “alojamiento web”, es un servicio que consiste en alquilar un espacio dentro de un servidor web para alojar todos los archivos de tu página web y que esta pueda ser vista en Internet.
Se podría decir que el hosting es el lugar donde viven todos los archivos de tu sitio web (tales como imágenes, texto, documentos html y css, vídeos, PDF, entre otros.), y que gracias a él, los usuarios pueden acceder a tu página.
Y ahora tú te preguntarás: ¿si son mis archivos por qué no los puedo guardar en mi propio ordenador y ya está?
Pues la respuesta a tu pregunta es muy sencilla. Para que tu página web funcione correctamente, es necesario configurar el servidor web junto a los archivos de tu página web con un hardware y un software determinado y complejo.
Un ordenador normal no tiene la suficiente potencia como para poder hacerlo de forma óptima. Por eso existen las empresas de hosting que te pueden ofrecer planes de servidores web conectados a una red muy rápida.
Estas empresas también nos facilitan todo lo relacionado con la gestión de estos servidores y su software, así como la seguridad, el soporte, el ancho de banda, la velocidad y mucho más. Todo dependiendo del servicio que contrates.
A continuación, te dejamos el botón para que te suscribas a nuestro hosting en la nube de alta velocidad llamado Cloudways (más adelante te explicamos qué es un hosting en la nube y sus ventajas):
¿Cuál es la diferencia entre un dominio y un hosting?
Como te acabamos de explicar, el hosting es el espacio en un servidor donde se aloja tu página web para que esta pueda ser vista en Internet por los usuarios.
Mientras que el dominio es la dirección que se escribe en el navegador y sirve para que los visitantes puedan identificar y acceder al sitio web.
Por lo tanto, se puede decir que todo se inicia en el dominio. Ya que es el nombre que tendrás tú o tu marca en Internet, y por el que los usuarios te reconocerán.
Puedes poner tu nombre o el de tu marca como dominio. Por ejemplo, nuestra empresa se llama “Web para Escritores” y nuestro dominio en informática se llama “webparaescritores.com”.
Las partes de un dominio son las siguientes:
– Nombre
Es la designación que le pondrás a tu dominio, como ya te he comentado antes.
Puedes poner el que más te guste. Pero recuerda revisar primero si el dominio que quieres está libre o ya lo está usando otra persona o entidad. De ser así, tendrás que pensar en otro.
¿Cómo saber si el dominio que tu quieres está libre?
Una herramienta gratuita que te permite comprobar qué dominios están libres es DonDominio. Además, también te posibilita comprarlos y tiene algunos planes de hosting.
– Extensión
Las extensiones te sirven para indicar el giro de tu sitio web. Por ejemplo, si es una comunidad se usa “.net”, si es una organización sin ánimos de lucro se utiliza “.org” y si es una página empresarial utilizarás “.com”.
Además, existen dominios geográficos para indicar a qué país pertenecen, por ejemplo, un sitio web español puede usar “.es” o “.com.es”, etc.
– El “www” o subdominio
El “www” o World Wide Web también suelen figurar en los dominios, pero no forman parte como tal de él.
Cualquier dominio puede tenerlo, pero este solo forma parte de un registro CNAME (Canonical Name Record) que hace que el “www” funcione como si fuese el dominio principal.
Por lo que si quieres tener el “www” en tu dominio, solo tienes que incluirlo en tu plan de dominio y hosting. Es muy sencillo.
El hosting y el dominio, a pesar de ser dos cosas distintas son complementarias, es decir, siempre están juntas.
Uno necesita del otro para poder funcionar, y es por eso que mucha gente los puede llegar a confundir o tiene un concepto equivocado de lo que son.
Principalmente, el sistema de nombres de dominio es como una gran librería de direcciones que se está actualizando constantemente.
Detrás de cada nombre de dominio, hay una dirección de hosting que almacena los archivos de una página web.
Por lo que sin nombres de dominio, no sería posible que los usuarios encontrarán tu página web y sin el hosting no podrás construir el sitio web.
Ahora que ya conoces qué es un hosting, qué es un dominio, y cómo se diferencian. Lo más importante es saber los tipos de hosting que existen y cuáles se adaptan mejor a tus necesidades.
¿Cuáles son los tipos de hosting?
Gracias a que la tecnología ha ido evolucionando tanto en tan poco tiempo, han ido apareciendo diferentes tipos de hosting para así poder satisfacer las necesidades de los diferentes sitios y usuarios.
Existe una extensa gama de hosting. Pero aquí solo te explicaremos las principales opciones.
Es necesario que conozcas los siguientes tipos, ya que son los más importantes -en especial si estás interesado en comprar un hosting para tu página-.
- Hosting gratuito
Los hosting gratuitos, aparte del alojamiento de los archivos en un servidor, suelen permitirte incluir prestaciones más importantes.
Por ejemplo, proporciona el acceso vía FTP, es decir, mediante el protocolo de transferencia de archivos, que es un protocolo de red para la transferencia de archivos entre sistemas conectados a una red.
También te permite prestaciones tales como el correo electrónico y el soporte para aplicaciones PHP.
Para que el dominio también sea gratis, suelen ofrecer un subdominio del propio proveedor. Como por ejemplo, WordPress o Blogger.
– Ventajas →
- Para empezar en el mundo de los hosting, es fácil de probar y aprender. Además, te permite mantener un entorno de desarrollo para un escenario real a coste cero.
– Desventajas →
- Este tipo de hosting es muy limitado en cuanto a espacio y tráfico. Las opciones gratuitas suelen tener una capacidad de proceso pequeña, grandes limitaciones de los recursos como el espacio en disco, poca memoria o la transferencia mensual.
- El nivel de servicio es de muy baja calidad, por lo que suele tener muchas caídas y paradas de mantenimiento.
- Del mismo modo, se muestran anuncios publicitarios en la parte superior de cada página y la mayoría te ofrecerán subdominios.
- Hosting compartido
El hosting compartido es la opción más consumida por la mayoría de los usuarios.
Como su mismo nombre dice, esta modalidad aloja a varios sitios web de diferentes personas en un mismo servidor.
Entre ellos no se ven, cada uno tiene su propio espacio privado y exclusivo. Pero la carga que generan sus páginas webs en el servidor es compartida, y por lo tanto, el peso de una web puede afectar a otra.
Este tipo de hosting es excelente para blogs personales o pequeños negocios en línea.
– Ventajas →
- Este te puede resultar bastante económico, ya que no tienes que pagar por adelantado todo el servidor. Del mismo modo, puedes conseguir prestaciones de gran calidad por muy poco dinero.
- Es fácil de usar, ya que el servidor está preconfigurado con las opciones más populares y la empresa que elijas para que gestione tu hosting se hará cargo de las actualizaciones de mantenimiento y seguridad de tu página.
- Por lo general, se adapta muy bien a las necesidades de uso personal como, por ejemplo, un blog, profesionales y pequeños negocios.
- Al ser de mayor calidad aguanta mucho más tráfico que el hosting gratuito.
- Al ser un buen servicio de hosting, te ofrece una disponibilidad del 99 %, lo que significa que el servidor se podría caer como máximo el 1 % del tiempo.
– Desventajas →
- La principal desventaja del hosting compartido, es que algunos proveedores poco serios apuran demasiado el número de usuarios que pueden sostener en su servidor, por lo que acaban con servidores completamente infradimensionados.
- Al compartir el servidor, si un sitio web comienza a consumir muchos recursos, en ese servidor se verán afectados todos, volviéndose más lento y más inestable -con caídas frecuentes y largas-.
- Es menos flexible, pues no podrás modificar el servidor a tu antojo. Si quieres añadir o quitar algo, el resto de usuarios también se verán afectados.
En definitiva, tienes que tener cuidado con el proveedor que elijas para tu hosting.
Si el proveedor mantiene una holgura sana en el dimensionamiento del servidor, tu web podrá aguantar mucho tráfico. Pero si el proveedor no cumple con este requisito, te puede jugar una mala pasada y que tu página web se caiga constantemente.
- Hosting VPS (Virtual Private Server)
En la modalidad de hosting VPS, aunque tu sitio web esté alojado en el mismo servidor físico que otros, un VPS permite que cada sitio web sea completamente independiente. Como si cada sitio estuviera en un servidor diferente.
Cada VPS se corresponde a una partición aislada dentro de un servidor físico, y en cada una de estas es posible instalar cualquier software que desees sin afectar a los demás.
A diferencia del hosting compartido en el que los problemas de un solo sitio web pueden hacer que todo el servidor se bloquee, con el VPS esto no ocurriría. Los problemas que tenga un sitio web solo afectarían a este.
– Ventajas →
- Te ofrece un esquema muy flexible, capaz de adaptarse rápido a tu demanda.
- Es una solución muy profesional, ya que viene unida a un mayor control del servidor de hosting o a la posibilidad de poder crear varios espacios independientes.
- Tienes la posibilidad de alojar diferentes páginas webs con un único servicio de hosting como cuentas diferenciadas y adaptadas a diferentes necesidades.
- Es un servicio intermedio entre el hosting compartido y el dedicado (explicado a continuación). Por lo que un VPS te brinda la independencia y flexibilidad de un servicio de hosting dedicado, pero al precio de uno compartido.
– Desventajas →
- Hay un leve aumento del precio, las opciones más baratas se encuentran entre los 20-30 € al mes.
- Tiene una mayor complejidad técnica en cuanto a la administración del servidor. El objetivo de un hosting VPS no solo consiste en mayores prestaciones. Sino que una de las prestaciones más importantes por las que pagarías, es por el mayor control del servidor.
Por lo tanto, el hosting VPS (Virtual Private Server) es una opción para las páginas webs técnicas.
Ya sabes, si tu sitio web ha superado el tamaño de tu hosting compartido, pero no puedes acceder a un servidor dedicado, el VPS es la mejor opción.
- Hosting dedicado
En el hosting dedicado, a diferencia del compartido en el que intercambia el servidor con otras páginas webs, en este tú eres el único que usas el servidor web. Y todos los recursos están reservados para ti y son exclusivos.
Por lo tanto, el servidor será solo para ti, sin ninguna restricción, excepto las diseñadas para proteger la integridad del proveedor.
– Ventajas →
- Tiene una flexibilidad y personalización muy alta, puesto que puedes elegir las especificaciones concretas de software de servidor para satisfacer tus necesidades.
- El proveedor se encarga de todos los temas relativos al mantenimiento de los equipos, sistema de clima, alimentación eléctrica y mantenimiento continuo del hardware.
- Tienes un rendimiento de recursos garantizado, pues no compartes tus recursos de servidor con nadie más.
- Posees el control total, ya que tienes pleno acceso de root a tus servidores dedicados y puedes configurarlos como quieras para satisfacer tus necesidades.
– Desventajas →
- Requieres de un conocimiento técnico previo, pues como te comenté antes, será tu responsabilidad administrar y configurar el servidor.
- Es más caro que otros tipos de hosting, pues al no compartirse con otros clientes cuesta más.
- Hosting gestionado o especializado
Con la creciente popularidad de determinadas aplicaciones CMS, es decir, sistema de gestión de contenidos como WordPress, la opción de un hosting especializado ha ido cogiendo fuerza.
Lo que pretende este tipo de hosting es dar un paso más allá de un hosting “puro” y ofrecer un soporte integral que no se limita a los servidores en sí.
Estos incluyen también el soporte técnico, lo que garantiza el correcto funcionamiento de estas aplicaciones.
Por lo tanto, el hosting gestionado es administración proactiva de la aplicación en cuestión. Es decir, ellos administran el servidor y la aplicación con sus actualizaciones, parches, configuración de seguridad, etc.
Este servicio lo que pretende es que te olvides de los problemas del hosting, la aplicación y te centres en los contenidos de tu sitio web.
– Ventajas →
- Este tipo de hosting está optimizado para la aplicación en cuestión.
- Te permite quitarte la carga de tener que lidiar con las tareas más pesadas y complejas para alguien sin muchos conocimientos técnicos.
- Al ser especialistas en la aplicación, conocen todo sobre ella.
– Desventajas →
- En este tipo de hosting se aumenta el precio sensiblemente.
- Cloud hosting
Con la evolución de la tecnología ha aparecido un nuevo tipo de servidor: el cloud hosting (hosting en la nube), una opción relativamente reciente.
Este trata de una evolución del hosting tradicional, pues usa tecnologías propias de la nube y reparte el servicio entre varias máquinas físicas.
En este modelo es también muy típico la tarificación por consumo, es decir, medir la potencia de procesamiento consumida, etc.
– Ventajas →
- Posee una gran seguridad y una gran flexibilidad para crecer fácilmente ante una mayor demanda, es decir, la escalabilidad de tu página.
- Posee una mayor personalización en comparación con el hosting compartido. Es decir, dispones de un servidor completo en el que podrás alojar tu página web, pero también cualquier otra aplicación que necesites.
- Tiene una muy buena relación calidad/precio. Gracias a la flexibilidad del cloud hosting, solo pagarás por los recursos que consumas en cada momento.
- Es un hosting capaz de adaptarse de manera muy rápida y sencilla a tus necesidades.
- Te ofrece una estabilidad y tiempo online. Pues un cloud hosting no está atado a un servidor físico y, por lo tanto, no se ve afectado por fallos de hardware, por lo que te permite tener una garantía de disponibilidad muy elevada.
– Desventajas →
- Suele tener un precio más elevado que el hosting compartido.
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¿Cómo contratar un hosting que se adapte a tus necesidades?
Tienes que elegir un hosting que cubra tus necesidades con respecto a espacio, transferencia mensual, soporte técnico, velocidad, seguridad, etc.
Y para poder elegirlo tienes que tener en cuenta los siguientes factores:
- Disponibilidad → Este es uno de los factores más importantes a la hora de la elección del hosting. Pues necesitas un mínimo de un 99 % de efectividad si quieres que tu servidor esté en línea siempre.
- Soporte técnico → Asegúrate de que la empresa proveedora cuente con una línea telefónica a la que puedas llamar para que te ayuden en caso de que tengas algún problema con el servidor.
- Equipo de trabajo → Es bueno que investigues si la empresa que vas a contratar está equipada con un buen hardware, pues esto afectará al rendimiento de tus servidores.
- Reputación de la empresa → Una de las mejores formas de observar si una compañía es buena o no, es investigar si sus clientes están satisfechos con sus hostings.
- E-mail → Asegúrate de que el proveedor que contrates cuente con un webmail, pues esto permitirá que tu negocio sea escalable.
- Precios → La mejor opción no siempre es la más económica. La calidad siempre debe ser primordial, adaptate al presupuesto que tengas; pero también intenta que sea de buena calidad y con buenas prestaciones.
Por ejemplo, si tienes un blog o una página web en WordPress, lo mejor sería que contrataras un hosting gestionado para esta aplicación.
Puesto que este tendrá los requisitos y prestaciones necesarias para que tu sitio web funcione de forma eficiente. A partir de ahí, puedes evaluar el soporte técnico, la cantidad de espacio que necesitas para alojar los archivos y así lo puedes ir adaptando.
Conclusión
Como comentamos anteriormente, el hosting es el lugar donde viven todos los archivos de tu sitio web y que gracias a él, los usuarios pueden acceder a tu página.
Por lo tanto, podemos decir que el hosting es totalmente necesario para poder desarrollar tu página web, pues sin él poco puedes hacer.
Existen muchos tipos de hosting entre los que puedes elegir y con una gran variedad de precios dependiendo de los proveedores. Las principales opciones son: el hosting Gratuito, el Compartido, el VPS, el Dedicado, el Gestionado y el Cloud hosting.
Tienes que recordar siempre que hosting y dominio no son lo mismo. Son dos cosas distintas aunque complementarias. Uno necesita del otro para poder funcionar, y es por eso que mucha gente los puede llegar a confundir.
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